Ciberliteratura

Concepto

Ciberliteratura es un término utilizado para hacer referencia a la creación literaria realizada para un entorno virtual. Es equivalente a los términos electronic literature y digital literature, notablemente más utilizados en el mundo anglosajón. La literatura electrónica o ciberliteratura comprende un conjunto de manifestaciones que, con la finalidad estética propia de esta forma artística, constituyen una nueva manera de entender lo literario a partir de las posibilidades tecnológicas abiertas por el desarrollo del entorno digital. Una de sus características esenciales es la imposibilidad de acceso a las mismas fuera de dicho entorno, por lo que no debe ser confundida con la literatura digitalizada, entendiendo por esta última la que resulta de la reproducción digital de textos ya existentes en formato papel o creaciones que, aunque no estén precedidas por su publicación en papel, responden a las mismas características de aquellas y pueden ser leídas como tales.

La ciberliteratura no puede ser reproducida de forma impresa, pues se trata de textos en movimiento o dinámicos, que requieren generalmente, en mayor o menor grado, la interactividad del lector. A esta interactividad se une el entorno multimedia e hipertextual, característico de dichas obras. Ciber es una expresión sincopada del inglés cybernetics (cibernética) y comprende, según el Diccionario de la Real Academia Española, lo perteneciente o relativo a la realidad virtual. Por su parte, el ciberespacio se define como el ámbito artificial creado por medios informáticos.

Análisis

El auge de las nuevas tecnologías y el uso generalizado de Internet han proporcionado un nuevo espacio en el que constantemente se generan nuevos formatos que son utilizados por miles de usuarios con diversos fines. Nunca ajeno y siempre sensible a los cambios sociales, el ámbito de lo literario ha experimentado también las transformaciones generadas por esta nueva forma de comunicación. Internet se ha convertido en un espacio versátil para creadores, lectores y editores, en el que la literatura ha tomado derroteros diversos. Actualmente es posible encontrar en la Red una extensa relación de revistas, foros literarios, editoriales, colecciones, páginas de y sobre autores, portales, proyectos de investigación literarios, bases de datos, recur- sos, bibliotecas virtuales, que ponen de manifiesto el potencial de este medio para difundir, informar, recopilar, promocionar, publicitar o divulgar cualquier aspecto que tenga que ver con la literatura en sus distintas vertientes.

En este contexto, tampoco la creación literaria ha permanecido al margen, dando lugar a la ciberliteratura, literatura digital o literatura electrónica, cuya finalidad e intencionalidad es diferente a la de la literatura digitalizada. La literatura digital –que no digitalizada– constituye en la actualidad un espacio creativo que ha generado nuevas formas de textualidad (Chico Rico, 2009), que implican un comportamiento específico de creadores y lectores, aunque no debemos obviar que, como ocurre con los fanfics, la blognovela o las redes sociales, el medio digital en general ya venía potenciando que lectores y escritores explorasen nuevos posicionamientos que imprimen actualmente un carácter diferente a las relaciones tradicionalmente establecidas en la comunicación literaria. Pero de forma complementaria, la ciberliteratura va más allá y no solo supone nuevos posicionamientos, sino que transforma profundamente la habitual relación lector-autor y la forma de concebir los procesos de escritura y lectura literarias (Morales Sánchez, 2011). Con respecto al primero de ellos, no podemos eludir el hecho de que los múltiples códigos utilizados en la creación tienen como resultado una coautoría o autoría colectiva (programadores, diseñadores gráficos, escritores), dando lugar a un espacio de creación múltiple que puede llegar a contemplar la participación del lector en dicho proceso, circunstancia que origina asimismo la formulación del concepto de «escrilector». En la misma línea, el proceso de lectura también se ve influido por esta posibilidad de interactuación –aunque no se da en todas las obras en el mismo grado–, a la que ha de sumarse la utilización por parte del lector de distintas estrategias lectoras para acceder al texto (Borrás, 2008: 29).

Por otra parte, el resultado de este proceso creativo es un entramado textual complejo, que puede albergar distintos niveles e itinerarios combinando imagen, sonido, palabra con múltiples efectos. En este sentido, Espen Aarseth llama la atención sobre el hecho de cómo el usuario «puede perderse y descubrir caminos secretos en los textos, no metafóricamente, sino mediante las estructuras topológicas de la maquinaria textual» (2004: 121), en una nueva intertextualidad que ahora está explícita y visible a través de enlaces. Todo ello hace que uno de los rasgos más significativos de la ciberliteratura sea la ruptura de la linealidad tradicional utilizando la posibilidad que le ofrece su estructura hipertextual.

Las estructuras textuales pueden adquirir formas diversas y plantear distintos grados de intervención –evitamos interacción, porque ello implicaría una dinámica de emisión y recepción, no siendo exacto que siempre se dé reciprocidad en el proceso–, incluso obras que combinan varias de estas posibilidades en el mismo texto. Entre ellas podríamos destacar: obras con distintos itinerarios posibles, a veces planteados en número aparentemente infinito; rutas de lectura imposibles de repetir o itinerarios que no permiten el retroceso; textos que solo son visualizables cuando el lector realiza acciones; textos que conjugan esto último con la estética de los videojuegos para plantear pruebas según niveles de dificultad; historias en las que podemos elegir personajes o escenarios; obras en las que el lector escribe y construye el texto; poemas en tres dimensiones realizados a partir de la selección de palabras, etc.

Ahora bien, la naturaleza especial de estos textos y las múltiples posibilidades que albergan en cuanto a formatos hacen difícil su clasificación. A la hibridación del código lingüístico habitual en la literatura tradicional con otros códigos de carácter audiovisual, se une la dificultad de identificar en estas creaciones los rasgos estructurales mediante los que habitualmente reconocemos la poesía, la narrativa o el teatro. Ello ha originado distintas propuestas para su clasificación.

Básicamente, una primera taxonomía parte de la descripción de las distintas creaciones a partir de los rasgos esenciales mediante los que se identifican los géneros tradicionales: poesía electrónica o ciberpoesía, ciberteatro o ciberdrama, narrativa digital o hipertextual; de manera particular, algunas propuestas teóricas como la formulada por M.ª Dolores Romero –en el seno del grupo de estudio LEETHI (2011)– apuntan la posibilidad de plantear nuevas formas de clasificación que atiendan a la especificidad de la literatura electrónica y su medio, con independencia de los rasgos que mantenga con la literatura en soporte tradicional. Como resultado, la ciberliteratura se dividiría en literatura hipertextual (el lector se deja llevar por el enlace), literatura ecfrástica (texto e imagen) y literatura serendipia (serendipity), que sería aquella en la que el lector alcanza su propósito a través de un proceso casual o imprevisto. En este sentido, puede afirmarse que el estudio de la tipología es uno de los ámbitos que ayudarán a establecer las especificidades de la literatura electrónica, pues el análisis de los ejemplos concretos permitirá determinar sus principales rasgos estéticos.

Implicaciones

Las obras de literatura electrónica no son todavía muy conocidas por el público en general, debido principalmente a que constituyen una propuesta novedosa que no se inserta en circuitos editoriales ni académicos. Salvo excepciones, la mayoría de las obras pertenecen al mundo anglosajón y su difusión ha sido muy limitada. De hecho, el interés que este tipo de propuestas ha despertado en los ámbitos teóricos universitarios no se corresponde ni con la difusión entre los lectores ni con su inclusión en la enseñanza de la literatura. Si bien es cierto que la proliferación de obras de los últimos años ha ampliado la esfera de usuarios, la lectura y el estudio de estas obras son más objeto de cursos específicos –incluso de posgrados– o de temas aislados en los temarios de teoría de la literatura sobre la literatura y las nuevas tecnologías. Ello hace que la ciberliteratura no se emplee todavía al mismo nivel que las obras literarias tradicionales en otros ámbitos educativos. Este conocimiento, aún deficiente, es en la actualidad diametralmente opuesto a la creación de portales, blogs y webs específicas sobre la materia. A continuación se ofrecen algunas de las direcciones que contribuyen en la actualidad a la difusión de la ciberliteratura y a su conocimiento en el ámbito hispánico:

• Bliblumliteraria. Blog específico de literatura digital editado por Félix Remírez, que ofrece información sobre todo lo que ocurre en el mundo digital, además de albergar el acceso a su creación propia. Es uno de los autores en lengua no inglesa que presentan obras de una gran calidad tanto por su estética como por su originalidad. http://biblumliteraria.blogspot.com.es/

• Domenico Chiappe, portal del autor. http://www.domenicochiappe.com/pg_d_1.html 

• Electronic Literature Association. Asociación de referencia de escritores y acadé- micos vinculados creativa o teóricamente al mundo de la ciberliteratura, en cuya página www.eliterature.org pueden encontrarse dos volúmenes de la Antología especializada de obras digitales.

• Hermeneia. Portal coordinado desde la Universidad de Barcelona por Laura Borrás e integrado por especialistas de ciberliteratura tanto creadores como teóricos. En él se reúne toda la información sobre los más recientes estudios y eventos relacio- nados con la ciberliteratura en el marco internacional. http://www.hermeneia.net

• Laboratoire Paragraphe. Université Paris 8. Portal del grupo multidisciplinar ubicado en la Universidad de París, centrado en el estudio de la epistemología hipertextual desde 1995. http://paragraphe.info/content/view/18/66/lang,fr/ .

• Literaturas españolas y europeas del texto al hipertexto. Leethi. Grupo interdisci- plinar de la Universidad Complutense de Madrid, que reúne a investigadores de diversa procedencia y abarca el estudio de la literatura digital desde distintas pers- pectivas. http://www.ucm.es/info/leethi/.

• Jaime Alejandro Rodríguez. Página personal. Universidad Javeriana de Bogotá. A través de la misma puede accederse a sus proyectos, cursos y obra sobre y de literatura digital. http://www.javeriana.edu.co/Facultades/C_Sociales/jaime_a/ .

• Portal del Observatorio para la Cibersociedad. Espacio para la reflexión, el análisis y el debate sobre el ciberespacio desde las ciencias humanas y sociales. Recoge en su espacio las intervenciones y ponencias presentadas en los distintos congresos de la Cibersociedad realizados hasta el momento con importantes aportaciones en el ámbito de estudio de la ciberliteratura. http://www.cibersociedad.net/ .

• Portal de Literatura Electrónica Hispánica, coordinado por Juan José Díez. Parte del proyecto de la Biblioteca Virtual Cervantes, recoge las últimas novedades en creaciones y artículos sobre ciberliteratura.
http://bib.cervantesvirtual.com/portal/literaturaelectronica/ 

• Rui Torres. Página personal. Universidade Fernando Pessoa. http://telepoesis.net/poesias.html  

• Taller de narrativa digital. Universidad Javeriana. http://www.javeriana.edu.co/relato_digital/r_digital/taller/taller_index.htm.  

Iniciativa única en su género, proporciona herramientas e información para el aprendizaje en la lectura y construcción de narraciones digitales. Consta de tutoría virtual, foro interactivo y ejercicios de diversas técnicas relacionadas con el diseño y construcción de hipermedias de ficción. Está coordinado por el colombiano Jaime Alejandro Rodríguez, uno de los autores pioneros de ciberliteratura y de reconocido prestigio internacional.

Referencias

Aarseth, E. (2004), «La literatura ergódica»,
en Sánchez Mesa, D. (ed.) (2004), Literatura
y Cibercultura, pp. 111-145, Madrid:
Arco Libros.

Albaladejo, T. (2009 a), «La poliacroasis en la
representación literaria. Un componente
de la retórica cultural», Castilla, Estudios
de literatura, 0, pp. 1-26.

Borras, L., 2008;

Chico Rico, F.,2009;

Morales Sánchez, I., 2011; ES ESTE MISMO?

Morales, I. (ed.) (2011), Competencias culturales
de los universitarios, Cádiz: Observatorio
cultural Atalaya.

Murray, J. M., 1999;

Romero, M. D., 2012;

SánchezMesa, D. (ed.), 2004;

Tortosa, V. (ed.), 2008.

Fecha de ultima modificación: 2014-03-25